En la época barroca, la pintura de Flandes pudo desarrollarse bajo gobernantes amantes del arte, incluso en una época económicamente difícil, mientras que en Holanda, país enriquecido debido al comercio, casi todas las clases sociales solicitaban obras de arte. En ambos países, la tradición naturalista de la pintura holandesa alcanzó nuevas cotas.
En la época barroca, la pintura de Flandes pudo desarrollarse bajo gobernantes amantes del arte, incluso en una época económicamente difícil, mientras que en Holanda, país enriquecido debido al comercio, casi todas las clases sociales solicitaban obras de arte. En ambos países, la tradición naturalista de la pintura holandesa alcanzó nuevas cotas.